No entiendo por qué nunca deja de atacarme este sentimiento, mezcla de anhelo y frustración. Por qué, si en mi semblante sin emociones se reflejaba más calma que vacío.
He sentido esto tantas veces antes, el instante previo, el miedo al fracaso, a volverlo a intentar, después de dejarse llevar por las pasiones.
Por qué...se aparece una imagen tan bella frente a mi que el deslumbrante color de su piel acaba con mi pared de aislamiento sentimental.
Ni siquiera sentí desde dentro, pasó todo por los ojos primero y aún estoy segura de que no ha llegado nada a tocar mi corazón... excepto la admiración atónita de tanta belleza y el miedo , la frustración de siempre, la falta de llaves para entrar en una vida. Mi problema es no ser parte ya de ese mundo que rodea por completo a mi anhelo. No, soy un destello, sólo un recuerdo ocasional. Y es tan difícil para la joven que no se encuentra nia si misma, hallar puertas hacia un sitio de importancia...
Aún no han tocado de nuevo mi corazón, pero ya comenzé a revolver fotografías del pasado y me dio envidia mi propia ausencia.
Quiero verte a los ojos y creer que por lo menos esta historia continuará luego de esos puntos suspensivos...
Y es que no soy perfecta, por eso me aterro. Porque hay tanto que quizás, tal vez, a lo mejor... quisieras mucho más. O tal vez juzgo desde muy arriba. ¿Pero,cómo saber que hay dentro de un corazón sin entrar en él? ¿Cómo entrar en una casa sin puertas ni ventanas?... Bueno, es que yo no las veo aún.
Me falta fe. Me falta creerme, lo sé. El problema es que no soy perfecta. Y me aterra no poder.
Aún sabiendo que hay demasiada poesía dentro de mi para regalar.
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